domingo, 25 de abril de 2010

DIVAGANDO ENTRE LO SIMPLE




I
Balan, balan las ovejas
en las cumbres borrascosas,
mientras vuelan entre estepas
pajarillos de alas rojas.

II
Mugen, mugen gruesas vacas
corriendo en un verde prado.
Suenan cencerros al aire,
vuelan moscas, huele a pasto.

III
Cacarean las gallinas
en tierras con mil gusanos,
bailando danza con danza
en un vivir cotidiano.

IV
Ladran, ladran los perrillos
en la casa de su amo.
Se acobijan, enternecen
mientras menean su rabo.

V
Ríen, ríen los chiquillos
en los patios descampados,
bajo la atenta mirada
de un adulto preocupado.

VI
Lloran, lloran los adultos
habiendo observado todo.
Mísero es el raciocinio
la conclusión y el otoño.

VII
Balan, balan las ovejas
corriendo en un verde prado,
bailando danza con danza
mientras menean su rabo.

VIII
Suenan cencerros al aire
en las cumbres borrascosas.
Ladran, ladran los perrillos,
huele a pasto, vuelan moscas.

IX
En la casa de su amo
cacarean las gallinas.
En los patios descampados
enternecen, se acobijan.

X
Ríen, ríen los chiquillos
en tierras con mil gusanos.
Pajarillos de alas rojas
en un vivir cotidiano.

XI
Lloran, lloran los adultos,
habiendo observado todo.
Balan, mugen, cacarean,
ladran, ríen... ¡Están locos!

Anuchy Ulloa
27-Jun-2.004





















miércoles, 14 de abril de 2010

DIVAGANDO EN LA DICOTOMÍA ENTRE CIELOS E INFIERNOS




I
Se suceden los infiernos

en los seres imperfectos,
que buscan la paz perpétua
sabiendo no ser eternos...
¿Es el cielo un lugar muerto?


II
Teniendo un alma inmortal

y un cuerpo de corta vida,
sería fácil preguntar: ¿por qué la dicotomía?
¿Somos hijos de El Eterno y amasijos de su ira?
¿O acaso seremos sólo un ligero soplo de vida?

III
Cuando naces ya te agotas
comenzando tu partida,
muriéndote poco a poco
suplicando nuevos días...
Vuelven las dicotomías

IV
No anheles amaneceres

que te traigan más ruina,
que agoten tu cuerpo débil
y controlen tu alegría, que prometen cielo eterno
a las almas cada día,
mientras crecen los infiernos
en los cuerpos y en las vidas...
¿Por qué la dicotomía?

V
¿Es acaso el cuerpo un ente y el alma su ruda guía?
¿O acaso es el alma un ser pobre, guiada por cuerpos sin vida?...
Confusiones sin medida
¿Por qué algo inmortal vive entre el polvo destruida?
¿Será que acaso se alegra de ver un cuerpo en su ruina?

VI
Infiernos de crudas llamas

en cielos fofos y en muermo,
me sabéis llevar al agua
cuando refrescarme quiero,
sabiendo que al llegar a ella
me moriré sin quererlo.

VII
Parece el infierno algo eterno
y el cielo su fiel cordero,
que se postra ante él sabiéndolo su verdugo,
se arrodilla ante su yugo
y le da su bendición
y mientras el infierno sube
el cielo se le arrodilla...
¿Quién es dueño, amo o guía?...
Es la cruel dicotomía.

VIII
Divagando una vez más
en una cama vacía,
me pregunto sin cesar
¿Qué es realmente la vida?...
¿Alma eterna, cuerpo en ruina, cielo abierto en llama viva?...
¿Por qué no tengo memoria?

¿Por qué pagar deudas bíblicas?

¿Será que el cielo es el infierno?

¿Será que el infierno es vida?

¿Serán como fieles amigos que se arropan cada día,

moviéndonos como títeres en esta tierra destruída?


IX
Oh, cielos e infiernos juntos
,
¿por qué no os uníis un día
,
para darnos nuevas luces
, para darnos nueva vida,
para quitarnos las dudas
que nos corroen sin tregua,
que nos llevan al abismo
,
que nos matan en cadena?


X
¿Pueden dos entes opuestos
vivir en sana armonía
mientras sus hijos perdidos

discuten día tras día?
¿O serán cielos e infiernos
confusiones aprobadas

entre dos fieles amigos que se ríen y se aman,

apartando hasta a sus hijos que claman, dudan y sangran,
mientras las fuerzas creadoras,
cielos e infiernos ya unidos,
se sientan apaciblemente, viendo a los hijos rendidos?


XI
Cielos e infiernos ya unidos,

os llamaré vida eterna
para que en esta fusión,

pueda comprender mi esencia.

XII
Miedos, risas y temores,

todo en una convulsión
,
de infiernos y cielos juntos

como en la perfecta unión,
donde siempre hay ganadores

donde siempre hay destrucción,

donde aquellos victoriosos,

cielos e infiernos reunidos,

bailan la danza perversa
de escucharnos sin oídos,
de vernos sin vista clara,

de palparnos sin sentirnos...

mientras nosotros, los tontos,

monigotes del destino,
teniendo los sentidos plenos,

ni oímos, ni vemos, ni sentimos...
Creemos saberlo todo, sin saber ni si existimos.
Ancuhy Ulloa
01-Mar-2.001



jueves, 8 de abril de 2010

En Abril...


Este mes voy a publicar dos de mis poesías, que ya tienen algunos años. Espero que les gusten.

DIVAGANDO EN LA TORMENTA


I
Vienen silvando los vientos
arrastrando polvos muertos
que pasan por mi ventana
y tupen mis sentimientos.
Es su aire, es mi encierro.

II
El rayo también se cuela
a través de mi silencio...
No me habla, no me alumbra,
me revuelve más por dentro,
como intruso en mi morada,
como oscuridad al ciego.
Es su luz, mi desconcierto.

III
Truenos retumban por fuera,
truenos retumban por dentro,
cataclismos en picada
derrumbándose en misterio.
Es el cielo, es mi infierno.

IV
Cae la lluvia en mi ventana
gruesa y fría como el hielo
me va penetrando el alma
surcando todo en su empeño.
Es su agua, es mi miedo.

V
Me apagas cuando deseas,
sublevas mi desconcierto,
cuando me apaciento me inflamas
y luego vuelves a apagar el fuego.
Soy como una marioneta
ante los designios del viento.

VI
¿Eres sólo una tormenta?
¿Eres sutil aguacero?
¿Eres trueno vigoroso, anunciando un tiempo nuevo?
¿O acaso un rayo brillante, deslumbrando en su portento?
Quizás sólo sea mi alma, desgarrada y sin aliento,
viendo en una tibia noche, espectros al aire sueltos,
fantasmas en mi cabeza, congelándome en silencio.

VII
Es su aire, es mi encierro
es su luz, mi desconcierto
es el cielo, es mi infierno
es su agua, es mi miedo

VIII
Sabe a rosas mi deseo, es mi vida y mi reto
No es tormenta, ni aguacero,
es mi fuego casi eterno entre el bien y el mal en juego.
Mientras ríen, me lamento.

IX
Sí, la tormenta es sólo mía
la noche es tibia, no hay truenos.
El cristal de mi ventana
sigue empañado por dentro.
Afuera cantan los grillos,
suena el río como un eco
rociando la tierna grama
cuyo aroma surca el viento.
Todo es orden, pasa el tiempo.

X
Mi alma sumida en llamas
continúa en su descenso...
¡Ella era la tormenta!,
divagando en sus infiernos.

Anuchy Ulloa
05-Dic-2.003